Terminando casi ya el mes de noviembre, en su última semana, llega la festividad de la Virgen Milagrosa, titular junto a San Dámaso del templo parroquial, por ello toda la comunidad se vuelca y prepara un tríduo en honor a Nuestra Señora bajo la advocación de Virgen Milagrosa. Nuestra Virgen uniéndose también a estos actos es cambiada de atavio, adoptando colores más acordes con la festividad, y aprovechando ya también la próxima fiesta de María Inmaculada, luce vestido blanco con bordados en su parte inferior y en la parte del pecho y manto brocado celeste. Espero os guste.
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